La Respiración y las Emociones

La respiración profunda es nuestro cordón umbilical con la existencia; no es solamente nuestro verdadero aliento de vida, pero nos cimienta en el océano mismo de la energía de vida. Un bebe recién nacido, respira en un ritmo profundamente relajado, desde su vientre y se siente en casa en el mundo.

Pero al crecer nos dejamos invadir por creencias, ideales equivocados y comportamientos nocivos que nos provocan miedos y tensiones que limitan la vibración de este eco de respiración dentro de nosotros. El hombre moderno respira desde el pecho y ha perdido contacto con la existencia, con otros y con él mismo, siempre buscando la seguridad del útero perdido en el dinero, el sexo y el poder. Como resultado, nos estamos perdiendo del desarrollo de muchas dimensiones mágicas de la vida, en el reino físico y espiritual. Hoy en día vemos que este problema se vuelve más y más notorio en la sociedad y se muestra en tanto estrés relacionado con desórdenes psicosomáticos, desde la depresión, ataques de pánico, el sentimiento penoso de vacío en nuestra vida, hasta en dolor de corazón, dolencias nerviosas, alergias, desórdenes alimenticios, problemas digestivos, dolores de cabeza e insomnio, etc. 

 Tipos de respiración 

1-Clavicular: Debido a la forma piramidal de los sacos pulmonares, es el menos eficaz de los tres: máximo esfuerzo y mínima entrada de aire. Es la forma de respirar de muchas mujeres, sobre todo embarazadas y el de muchos pacientes en estados terminales. 
2-Pulmonar o costal: Es la realizada por la parte media de los pulmones a nivel costal.
 3-Completa o diafragmática: Se produce por el total llenado de los pulmones, incluyendo la parte baja, media y alta de los mismos. Se realiza de forma pausada, y sin forzar la capacidad pulmonar.

Ejercicio Básico de Respiración

De acuerdo a lo que se necesite trabajar, hay diferentes ejercicios.

 Es fácil notar que una exhalación lenta tiene un efecto calmante y relajante, nos vuelve somnolientos, y por lo contrario, una inspiración lenta con una rápida exhalación inquieta y despierta. Está demostrado que durante el sueño, la exhalación es más lenta que cuando estamos despiertos.

Básico (para regular la respiración)

Inspiración: 4 tiempos

Apnea: 2 tiempos

Exhalación: 4 tiempos

Repetir varias veces al día (mañana-tarde-noche), no más de 3 minutos por vez.